Alfonso el Sabio. Les Cantigas Santa Maria, vol. 2
Clemencic Consort





medieval.org
Harmonia Mundi HM 978 (LP)

1977








A

1. Virgen, madre gloriosa   [8:30]   CSM  340
soprano, contre-ténor, barytone, flûte à bec

2. Como poden per sas culpas   [5:14]   CSM  166
vièle, zarb, guimbarde

3. Santa Maria, strela do dia   [3:59]   CSM  100
voix d'hommes, gaita gallega, zarb, cloche, hochet, tambour, cymbales
(1ere version)


B

1. Ben pod'   [2:09]   CSM  73
flûte double, castagnettes, zarb, crotales

2. Assi como Jesu Cristo   [4:26]   CSM  13
chant et vielle à roue, tambour, flûte à bec

3. Loemos muit'a Virgen   [2:54]   CSM  370
baryton, bombarde, tambour, hochet

4. Por fol tenno que na Virgen   [2:29]   CSM  303
sifflet, bombarde, cornet à bouquin, vièle, rubebe, tambour, cymbales

5. Pagar ben pod'   [5:44]   CSM  25
rabé morisco, chitarra saracenica, zarb





CLEMENCIC CONSORT
René Clemencic

Pilar Figueras, soprano, gaita gallega (cornemuse)
Zeger Vandersteene, contre-ténor, ténor
Pedro Liendo, baryton
René Zosso, chant et vielle à roue
René Clemencic, flûte double, flûte à bec, sifflet
Michael Dittrich, rabé morisco, vièle
Alfred Hertel, bombarde
András Kecskès, chitarra saracenica (guitare mauresque), rubebe, guimbarde
Johann Krasser, castagnettes, tambour
Frantisek Pok, cornet à bouquin, crotales, hochet
avec la participation de Chemirani, zarb





fuentes:
Escorial Ms. J.b.2 / Escorial T.j.1 / Toledo, Catedral caj. 103, num. 23

Enregistrement Harmonia Mundi, Novembre 1976
Prise de son et montage: Alberto Paulin
Illustration. Cantigas de Santa Maria, Ms. Escorial b-1-2. fol. 154
Edita: EDIGSA, Barcelona/1979



Los instrumentos y la instrumentación son los que aparecen en la trasera del LP de Edigsa.
En este LP lo que viene en español es la gaita gallega (cornemuse, dicen entre paréntesis)
La guitare mauresque ha pasado a ser chitarra saracenica.
A Djamshid Chemirani lo han sacado del grupo y lo han puesto como colaborador.
El hochet aparece como tocado por F. Pok.
Seguro que también lo tocaba en el LP 1 y se olvidaron de incluirlo

En medieval.org el listado de instrumentos es idéntico al del LP1.


Aparte de los pellizcos y otros pintoresquismos en la traducción, choca que Alfonso nazca en 1223
(y en 1222 en la grabación de Pepe Rey), acostumbrados de toda la vida a la fecha de 1221;
por lo menos, si no la fecha, se mantiene el nombre.

Tengo la sospecha de que fue la interpretación de la CSM 166 de este disco
la que utilizó Basil Poleduris para una famosa escena de Conan el Bárbaro.
Seguro que le dio un pasmo a Alfonso X viendo a Arnold Schwarzenegger.
La CSM 166 es probablemente la cantiga con más versiones (más que la CSM 100).








El códice «El Escorial j.b.2» de la segunda mitad del siglo XIII contiene más de 400 canciones mariales. Constituye la recopilación más importante de monodías no litúrgicas del siglo XIII. «Este códice, conocido con el nombre de Codex Princeps, es el único que contiene todo el repertorio de las Cantigas de Santa Maria. Puede ser considerado como el códice musical más importante de la monodía cortés de la Europa medieval, gracias a su contenido y a su medición muy elaborada. Si bien España no ha transmitido otros documentos musicales, por este único códice figura entre las primeras naciones musicales de los tiempos antiguos.» (H. Angles). Otros dos códices del siglo XIII (de El Escorial y de Toledo) nos transmiten una parte del repertorio de las Cantigas. Otro manuscrito, conservado en Florencia, originario también de la corte de Alfonso el Sabio, pero que contiene los textos solos, sin las melodías, es remarcable por las espléndidas miniaturas.

Fue Alfonso el Sabio (rey de Castilla), también llamado el Astrónomo, quien hizo recoger estas canciones mariales. Una parte de las poesías y las melodías son de su propia inspiración; las demás fueron creadas por los poetas y músicos de su corte. Pero también es posible que textos nuevos fueran adaptados a melodías ya existentes, como se acostumbraba en la época.

Alfonso el Sabio, hijo de Fernando III, el Santo, nació en Toledo en 1223. Entre 1242 y 1244 conquistó Murcia para Castilla y en 1252 fue coronado rey de Castilla y León.

Se rodeó en su corte de numerosos sabios. A él se debe una compilación de leyes (Las Siete Partidas); se halla en el inicio de la historiografía española, hizo traducir el Antiguo Testamento al español, y en el dominio de la astrología se le debe la mejora de algunas cartas planetarias ptolomeicas. Ante todo, no obstante, tenía una predilección por la poesía y la música. Algunos trovadores y juglares, hombres y mujeres (juglares y juglaresas), permanecieron en su corte; fueron españoles pero también cristianos, árabes y judíos. Ello nos demuestra su gran interés por el arte de los trovadores. Guiraud Riquier, por ejemplo, permaneció diez años de su vida (1269-1279) en aquella corte. Una veintena de trovadores le dedicaron canciones. Los trovadores tenían una categoría superior a los juglares, que eran simples intérpretes.

En el prólogo de las Cantigas, el rey ruega a la bella dama María que quiera reconocer en él a su trovador. En la Edad Media la frontera entre lo sagrado y lo profano fue muy débil. Podemos aún hallar el aspecto místico del amor, pero mucho menos el aspecto erótico de lo sagrado.

La lengua de las Cantigas es el gallego, próximo al portugués, que era la lengua poética predilecta en la corte de Alfonso el Sabio. La mayoría de las Cantigas (en aquella época cantiga era el término general para canciones sagradas y profanas) tienen un contenido narrativo y describen, en forma de leyenda, la fuerza bienhechora de la madre de Dios. Algunas leyendas tienen un carácter muy local, incluso personal. Las hallamos en formas parecidas en otras recopilaciones de milagros de la época. María, que sucede a las hadas, usando incluso sus mismos gestos y su misma apariencia, es considerada como protectora suprema en todas las situaciones de la vida. No hay pecados demasiado grandes, nada es demasiado banal, si se le pide ayuda en la forma correcta y en el momento oportuno; pero ella sabe también, si es necesario, vengar y castigar.

En aquella época la relación entre el hombre y el más allá era mucho más directa, más sencilla. Se creía que los dioses antiguos, las hadas y los espíritus, intervenían en la vida cotidiana en forma benéfica o maléfica. Las cantigas no narrativas, aparte del prólogo que es muy personal, son llamadas Cantigas de Loor, es decir de alabanza a la virgen celestial.

El tono de las Cantigas es agradable y popular, y se torna más hímnico en las Cantigas de Loor. Musicalmente hallamos influencias litúrgicas junto a cantos y danzas populares, o a la música de los trovadores. Las melodías son a menudo de una bondad trastornada, el ritmo de una fuerza emocionante.

Las canciones en refranes (muy cercanas al virolai francés) dominan. El inicio del refrán es usado, a veces, como fin de la estrofa. Los musicólogos no hallan acuerdo en la parte de influencia árabe de estas composiciones. Las influencias judías y bereberes han sido, generalmente, admitidas. Pero no hay duda que las sonoridades originales y la técnica de ejecución denotan una fuerte influencia árabe. En la corte de Alfonso el Sabio moraban, junto a los músicos cristianos, numerosos músicos árabes que aportaban con sus instrumentos, la técnica de expresión. Según numerosos testigos, incluso las mujeres cantaban, interpretaban y bailaban, a veces en las iglesias, al son de las cantigas sagradas. La disposición testamentaria de Alfonso el Sabio, donde pedía que la recopilación fuera legada a la iglesia que acogía sus despojos, prueba que las Cantigas de Santa María le eran particularmente queridas.

Antes de las cantigas narrativas, introducimos algunas versiones instrumentales de otras cantigas, puesto que también era habitual en la época interpretar canciones sólo con instrumentación. Las miniaturas del Codex Princeps nos muestran un número increíble de instrumentos de la época (más de treinta instrumentos distintos: cornamusa, órgano portátil, flautas, instrumentos de cuerda pellizcados, percusión diversa, etc...), interpretados por músicos cristianos, judíos y árabes.


Dr. René CLEMENCIC