medieval.org
graindelavoix.be
Glossa "Platinum" 32102
2007 (74')
01 -
Adieu mes tres belles amours
[6:26]
Patrizia Hardt, Yves Van Handenhove,
2 fiddles, lute
02 -
Amoureux suy
[4:40]
Yves Van Handenhove, Lieven Gouwy,
Bart Meynckens,
harp, lute
03 -
Je ne pouroye estre joyeux
[5:27]
Silvie Moors, Lieven Gouwy, Paul De
Troyer,
fiddle, lute
04 -
Se la belle n'a voloir
[4:01]
Yves Van Handenhove,
harp, fiddle
05 -
Qui veut mesdire
[4:20]
Patrizia Hardt,
2 fiddles, harp,
lute
06 -
Mon seul et souverain
désir [5:56]
Paul De Troyer, Bart Meynckens,
Björn Schmelzer
07 -
Les tres doulx yeux
[2:59]
Silvie Moors, Björn Schmelzer,
Lieven Gouwy, Yves Van Handenhove
harp, lute
08 -
Adieu, jusque je vous revoye
[8:26]
Silvie Moors, Paul De Troyer, Bart
Meynckens,
2 fiddles, harp, lute
09 -
Tant plus ayme
[5:03]
Patrizia Hardt,
harp, lute
10 -
Esclave puist yl devenir
[6:48]
Yves Van Handenhove, Paul De Troyer,
Bart Meynckens,
2 fiddles
11 -
Adieu mon amoureuse joye
[7:01]
Patrizia Hardt,
2 fiddles, harp,
lute
12 - Johannes OCKEGHEM.
Mort tu
as navre ~ Miserere
(Déploration sur la mort de
Binchois) [12:41]
Silvie Moors, Yves Van Handenhove,
Lieven Gouwy, Bart Meynckens
GRAINDELAVOIX
Björn Schmelzer
menestrels de bouche:
Patrizia Hardt - #1, 5, 9, 11
Silvie Moors - #3, 7, 8, 12
Yves Van Handenhove - #1, 2, 4, 7, 10, 12
Paul De Troyer - #3, 6, 8, 10
Lieven Gouwy- #2, 3, 7, 12
Bart Meynckens - #2, 6, 8, 10, 12
Björn Schmelzer - #6, 7
Thomas Baeté,
fiddle - #1, 5, 8, 10, 11
Liam Fennelly,
fiddle - #1, 3, 4, 5, 8, 10, 11
William Taylor,
harp - #2, 4, 5, 7, 8, 9, 11
Jan Van Outryve,
lute - #1, 2, 3, 5, 7, 8, 9, 11
Primero
fue la sorprendente misa Caput de Johannes Ockeghem. Ahora le toca el
turno, a su maestro, Gilles Binchois (†1460), a quien
aquél dedicara su
célebre déploration, pieza que se cierra este disco,
única ajena al
cantor de Cambrai. Si Pérès y Organum suenan muchas veces
más a sí
mismos que a los repertorios interpretados (y que lo sigan haciendo
para bien del arte), graindelavoix ha dado un giro de tuerca. Si el
primer disco fue fascinante, éste no le va a la zaga, aun cuando
y no
es fácil su ethos sonoro rompe con el anterior (no hay
machicotages),
siendo más "convencional", si es que este apelativo cabe en sus
trabajos. Schmelzer, el director, firma otra vez unas excelentes notas
que parecen propias del Journal of American Musicological Society. Tras
dejar sentada la relación música-texto en las piezas de
Binchois
(repito, para leerlo, sin tópicos), acomete once de sus planctus
(baladas y rondós, técnicamente, cinco de un
códice escurialense), más
el de Ockeghem, sumando dos voces femeninas a su formación
anterior
(emocionante el timbre y lo que hace Silvie Moors), con unos resultados
estremecedores. Como muestra, Mon seúl et souverain
désir, en un
registro gravísimo, que sobrecoge. Ojo con los criterios
interpretativos, justificados también en la carpeta del CD, que
ponen
patas arriba, y con tanta serenidad, principios aparentemente
irrebatibles... da casi vértigo. Hay audacia cantandi y docendi
en
estos flamencos que interpretan a franco-flamencos, con modos tan
distintos a las cristalinas polifonías al británico modo.
Para dogmas,
doctores tiene la Iglesia y, para ponernos los pelos de punta, este
melenas rubio, con nombre de tenista, que puede revolucionar los
criterios de interpretación de la música antigua.
Björn Schmelzer:
música en recipiente antropomorfo.