Grabaciones históricas. Escuela de Fez
Abdelkrim Rais, Orquesta Bríhí





medieval.org
Pneuma PN-190 (
grabación de 1960)

1998







I. Mizán Quddám al-Máya

01 - Búgya Al-Máya   [1:56]

02 - Twíshya Quddám al-Máya   [1:12]

San‘a-s:
03 - Al-‘ashiyya ilá l-gurúb   [2:48]
04 - Wa ‘ashiyyatin lá ziltu   [6:06]
05 - Qalbí l-ka’íb   [4:27]
06 - Qultu lammá záraní   [3:02]
07 - Da’ ‘anka lawmí   [2:38]

08 - Brwála · Nádmni yá jammár   [3:00]

09 - San‘a · Má ahsana l-’unsal   [4:38]

10 - Inshád al-Máya   [1:24]

11 - Brwála · Yá l-lí t‘rafní magrúm   [3:00]

San‘a-s:
12 - Yá man ‘alá jaddayhi   [3:10]
13 - Yá wáda l-yawáhir   [3:11]
14 - Qultu yá ‘ashiyya (with Twíshya)   [4:18]
15 - Shamsu l-‘ashí labsat nuhúl   [1:49]
16 - A‘zam yá ‘ashiyya   [1:24]
17 - Shamsu l-‘ashi qad garrabat   [1:03]
18 - 1. Yá shams l-‘ashiyya
2. Saffifú l-qit’án
3. Aná kullí milkun lakum (con Twíshya)
4. Shams l-‘ashiyya rawnaqat   [7:35]

Muhamed Jsásí táb’, rásd
19 - Inshád   [3:32]

Muhamed Jsásí táb’, raml l-Máya
20 - Muwwál   [5:12]






Orquesta Bríhí de Fez
dirigida por el Maestro Abdelkrim Rais

Cantor: Muhammad Isásí

Asesor artístico: OMAR METIOUI
Producción: EDUARDO PANIAGUA














Abdelkrim Rais, heredero del maestro Bríhí y creador de la Escuela de Fez, ha sido uno de los grandes maestros de la música arábigo-andaluza del siglo XX.
Con esta edición, patrocinada por la AECI (Agencia Española de Cooperación Internacional), queremos destacar la importancia de aquellos hombres que han dedicado su vida a salvaguardar y divulgar los preciosos testimonios de esta tradición oral, y que nos los han transmitido con su voz, con el corazón y con el alma.

EDUARDO PANIAGUA



HÁJJ ABDELKRIM RAIS (1912-1996)

Nacido en Fez en 1912, A. Rais iniciará su formación musical esencialmente cerca del m'allem (maestro) Bríhí. Junto con su contemporáneo Muláy Ahmed Lukílí frecuentó desde su infancia el mausoleo de Muláy Idrís. Este lugar consagraba cada viernes una sesión panegírica en honor al Profeta Muhammad. Los maestros ulémas (sabios) del samá (ceremonia musical religiosa) de Fez conocían al mismo tiempo el repertorio dhikr (oraciones), samá (audición mística) y amdáh (panegíricos), así como el repertorio de las núba-s; aunque trocando la poesía profana por textos sagrados, siguiendo la regla de oro de los qudúd (poemas de igual métrica). En efecto, las zawáyá (cofradías) jugaron un papel esencial en la preservación, enseñanza y difusión de este arte musical.

Por su persistente amor a la música, A. Rais era muy apreciado por su maestro Bríhí que lo sentía como discípulo predilecto e hijo espiritual. Bríhí se casó con la hermana de A. Rais. Le escogió como su ayuda y brazo derecho y éste le acompañó hasta sus últimos días. Después de la muerte del Maestro Bríhí en 1945, la dirección de la orquesta musical será concedida a A. Rais. Este traspaso no sucedió oficialmente hasta que el sheij de la cofradía religiosa l-‘Attár invitó a su casa a la orquesta del difunto Bríhí y pidió a Rais que tocara con el rabab de su maestro, al que nadie había osado acercarse, pidiendo a Dios que le inspirase en su nueva misión. Este detalle es un testimonio del importante papel de las cofradías en la preservación del patrimonio musical tradicional. Como signo de reconocimiento, el joven Rais interpretó una canción del mízán basit de la núba Raml l-Máya, cuya poesía es un panegírico:

¡Oh! reunión de adeptos (faquires), ¡Oh! maestros, levantaros.
Aprovechemos la ocasión para rendir honores
Mohammed es el enviado de Dios, rezad y alabad.
¡Oh! mis amigos orad por el más perfecto.
Orad sobre el guía, orad por él con pasión.

Desde entonces el rabab de su maestro estuvo en sus manos y no calló hasta su muerte.


Hombre de fe, con su presencia rendía homenaje a las ceremonias que tenían lugar en el Daríh (mausoleo) de Muláy Idrís al-Akbar y de Muláy Idrís al-Azhar, que Dios los bendiga. Era conocido por su respetabilidad y generosidad. Se ofreció para dar conciertos a beneficio de obras sociales y estuvo dispuesto para tocar la música andalusí hasta sus últimos suspiros.

En el campo artístico, contrariamente a otros maestros, nunca fue tacaño y jamás dejaba sin satisfacer las solicitudes de los alumnos, melómanos e investigadores, enseñándoles las san‘a-s (canciones) que preferían aprender, tocando aquellos mízán-s (fase rítmica) que ansiaban escuchar y desvelándoles los secretos de esta música.

Su objetivo era encumbrar este legado por todos los medios. Esto producirá, según nuestra opinión, efectos nocivos para la tradición, al abrir el camino a la era modernizadora que intentará satisfacer el gusto de toda una generación de marroquíes dominada por la música egipcia.

A. Rais murió el martes 27 de Agosto de 1996, y fue enterrado junto a su maestro Bríhí en el cementerio l-Qbáb de Fez.


ORQUESTA DEL MAESTRO BRÍHÍ (1936-1945)

Antes de 1936, todavía no estaba establecida una formación musical fija. En cada ocasión el maestro seleccionaba a sus músicos dependiendo de la circunstancia y de la remuneración económica. Mohammed l-Fásí, gran melómano y futuro ministro de educación y cultura del Marruecos independiente, simultáneamente a la creación de la Asociación de los Amigos de la Música Andalusí de Fez, establece una formación musical fija bajo la dirección del maestro Bríhí. Considerada como la primera y una de las mejores de Marruecos, esta orquesta de al-ala (música andalusí) reunía los más brillantes instrumentistas y cantantes de Fez, en una época en la que las influencias de Oriente y de Occidente eran casi nulas. M‘allem Bríhí dirigía mientras tocaba el r’báb (rabab) y Rais se situaba a su derecha con el ‘ud (laúd). Los otros miembros eran:

Drís Smíres, viola
l-Gálí sh-Shráybí, alto
Búbker l-‘Alawí, violín
hmed l-Bríhí, ‘úd
l-Husayn s-Sqallí, ‘úd
‘Azzúz Bnnání, tár y canto
Mohammed l-Jsásí, munshid (cantor solista).

Esta orquesta participó en el primer festival de música arábigo-andaluza organizado en el año 1939 en Fez, junto con otras formaciones venidas de Rabat, Oujda, Marrakech, Tetuán, etc...


ORQUESTA AL-BRÍHÍ DIRIGIDA POR A. RAIS (1945-1990)

La Orquesta al-Bríhí, dirigida por Hájj Abdelkrim Rais, era conocida por su espíritu conservador. Se caracterizaba por el rechazo a la asimilación de los instrumentos modernos europeos, así como por un juego instrumental sobrio, que no buscaba revisar la instrumentación tradicional. Tenía un estilo vocal equilibrado, donde las voces se complementaban dejando un gran margen de libertad al cantor solista.
Los miembros de la orquesta al-Bríhí eran:

Abdelkrim Rais, rbáb
Ahmed t-Tázi l-Bzúr, ‘úd y viola
Mouhammed Búzúba’, ‘úd
Drís Smíres, violín
Mohammed s-Smlálí, viola
Mouhammed l-Mrgáwí, viola
Muhammed l-Jsásí, cantor solista
‘Azzúz Bennání, tár
Muhammed t-Twízí, tár
Abd l-Ahad l-‘ámrí, drbúga.

En la música de las núbas todos los músicos tocan su instrumento y cantan simultáneamente.

La parte rítmica tuvo un papel importante en el conjunto y permitió un esplendor sin precedentes en el desarrollo de la técnica de los instrumentos de percusión: Tár y Drbúga.

En el tár, Mohammed t-Twizi estuvo entre los más grandes maestros. Además de una extraordinaria técnica conocía perfectamente todo el repertorio, música modal sobre la base de una línea melódica.

Como todos los instrumentistas tocan al unísono, las variaciones rítmicas generadas por las múltiples improvisaciones de los dos instrumentos de percusión permiten crear una dinámica dentro del binomio melodía-ritmo que rompe la posible monotonía.

La drbúga, integrada o reintegrada en los años 30 en este repertorio musical, conocerá un desarrollo singular con ‘Abd l-Ahad iniciando una escuela que se impuso a todos los futuros intérpretes de este instrumento (drábqui). Adoptó el modelo de instrumento de metal de cobre, desplazando al de cerámica. Desarrolló los golpes sobre el borde del instrumento (tik) perceptibles en los silencios de la orquesta, multiplicó los golpes (dum) en el centro del parche del instrumento. Y utilizó un juego de síncopas y matices, alternando las secuencias de los tiempos dentro de las medidas o compases (dawr).

A pesar de su reputación tradicionalista, Rais cedió a la tentación de integrar el piano en alguna de sus grabaciones como el quddám r-Rásd. En la última obra del presente disco podemos escuchar la intromisión del piano con una pequeña improvisación (taqsím). Rais utiliza de vez en cuando instrumentos orientales como el qánún (cítara o salterio) y el náy (flauta oblicua).


REALIZACIONES DE ABDELKRIM RAIS

Dada la importancia histórica de la ciudad de Fez, la orquesta Bríhí será invitada para representar a Marruecos en otros muchos países. En Marruecos participa en los festivales de Fez organizados entre 1982 y 1990. Su participación en el famoso festival de Chefchaouen fue apreciada.

Desde que tomó la dirección del Conservatorio en 1960, y animado por un espíritu más abierto, A. Rais creó una coral de jóvenes voces femeninas que acompañará a su orquesta en diversas ocasiones.

En 1982 aparecerá en el mercado marroquí “Min Wahry r-Rabáb, Majmú‘at Ash‘ár Wa Músíqá”. Bajo la inspiración del rabáb, este libro recoge poemas de la música al-ála y retoma todo el repertorio practicado por el maestro, pudiendo ser considerado como una versión actual del manuscrito del visir al-Jám‘í. Al publicar este libro, A. Rais facilitó a todos los amantes de esta música el que pudieran conocer los poemas desarrollados a su estilo, tal como él los cantaba.

Con su discípulo Muhammád Bríwel, en 1985, editó “al-Músíqá al-Magribyya, núba Gríbt l-Hsín”. Esta obra es una transcripción de (núba) Gríbt l-Hsín, siguiendo la version oral de A. Rais.

En el campo de las grabaciones fue el maestro que ha producido mayor cantidad, tanto a nivel nacional como internacional. En los años sesenta, a instancias de la Orquesta Nacional dirigida por Múláy Ahmed Lúkílí y de la orquesta del Conservatorio de Tetuán dirigida por Muhammed Ben l-‘Arbi Temsamani, realizó una serie de grabaciones de una hora de duración para ser emitidas por la Radio Nacional de Marruecos.

Participó con músicos selectos, bajo la dirección de Lúkílí, en el repertorio de ocho núbas patrocinadas por la Asociación de Amigos de la Música Andalusí de Marruecos y la UNESCO (1958-60).

En la Antología Al-Ála bajo el patrocinio del Ministerio de Cultura y La Maison Des Cultures Du Monde, 1989 / 1992 contribuye con la grabación de 4 núbas: (Núba Gríb l-Hsín, 6 CDs / Núba al Hijáz al Msárqí, 5 CDs / Núba al-Hijáz al-Kbír, 7 CDs / Núba al-Istihlál, 7 CDs).

En Francia, el “Institut du Monde Arabe” le rendirá un brillante homenaje en 1993, y difundirá un álbum de 2 CDs, ilustrando la grabación en directo de la velada musical organizada en su honor en París.

En el marco de los programas realizados por “El Legado Andalusí” y para la exposición “Música y Poesía del Sur de Al-Andalus” grabó la “Nuba de los poetas de Al-Andalus”, obra que retomará los poemas cantados de algunos poetas famosos de Al-Andalus como: Ibn al-Jatib, al-Shushtarí, Ibn Sahl, al-Qurtubi, etc.

Hasta los años ochenta no se podía acceder al repertorio de las núbas más que a través de las incompletas grabaciones de sus conciertos y fiestas privadas. Estas grabaciones circularon en cintas y permitieron la difusión de una gran parte del repertorio poco conocido. Existían melómanos que pedían al maestro la versión íntegra de un mizán (movimiento rítmico de la núba) concreto, con el fin de realizar su grabación. Pensamos que estas grabaciones tienen gran importancia histórica y merecerían ser actualizadas y presentadas al mundo de los interesados en este patrimonio musical.